viernes, 26 de marzo de 2010

Creando obras de arte

La publicidad es una forma destinada a difundir o informar al público sobre un bien o servicio a través de los medios de comunicación con el objetivo de motivar al público hacia una acción de consumo.


Esta es una de las tantas definiciones que podemos encontrar sobre el significado y objetivo de la publicidad. Sin embargo, en los tiempos que corren, lo más importante es captar la atención del público frente a la gran cantidad de competidores que hoy en día existen en cualquier sector. Esto cada vez se hace más difícil.


Entre tanto bombardeo de publicidad, en su mayoría carente de creatividad, es difícil encontrarse con alguna que impacte al público especialmente. Pese a ello, existe. Y no sólo consiguen el primordial objetivo de captar la atención del público, sino que además se convierten en verdaderas obras de arte. Pues como bien dijo Herbert Marshall McLuhan, uno de los grandes teóricos sobre la comunicación, “La publicidad es la mayor forma de arte del siglo XX”.


Aquí os dejo una serie de imágenes que me han llamado mucho la atención, por su gran originalidad y creatividad, así cómo su perfecta adaptación a los medios dónde se anuncian.







martes, 16 de marzo de 2010

Comparando

Ayer, mientras comentaba con unas amigas el anuncio del que os hablé la semana pasada, recordé un anuncio muy relacionado con el anterior. Se trata de un anuncio de la Asociación AFANOC. Seguramente todos lo recordéis. Por si acaso, aquí os lo dejo:


¡No me digáis que no pone los pelos de punta! A diferencia del anterior es un anuncio que, a mi parecer, y hablando, no sólo personalmente sino también profesionalmente, ha conseguido a la perfección transmitir el mensaje y objetivo de comunicación. Además, mantiene una incertidumbre hasta casi el final del spot, ya que es al terminar este cuando entiendes porque la niña se esta cortando el pelo. Algo que considero muy importante, pues en la mayoría de casos el espectador es bastante negado a ver este tipo de anuncios.

Sinceramente, teniendo en cuenta el problema tan delicado que trata, creo que es no sólo un gran anuncio, sino uno de los mejores.

Os dejo aquí también un anuncio más actual, que trata la misma enfermedad de una forma muy parecida. Se trata de la última campaña de Sanitas. 


Aunque creo que se trata de un anuncio que, como se suele decir, toca la fibra y es un buen anuncio, considero que el anterior está mucho mejor acabado. Además, personalmente creo, que la imagen final (las instalaciones de Sanitas), sobra. Estaría, con diferencia, mejor acabado, si se hubieran ceñido a finalizar el spot con el logotipo de Sanitas.

Pero de ser así, el problema quizás hubiera sido, el gran parecido, por no decir la igualdad, con el de AFANOC, pues aún teniendo un un objetivo de comunicación distinto, no se distancian demasiado.


¿Qué opináis?


martes, 9 de marzo de 2010

Causas justas, publicidad repugnante

Hay una diferencia muy grande entre un buen anuncio y uno que no lo es. La base está, principalmente, en transmitir el mensaje tal y cómo queremos, para así poder conseguir nuestro objetivo de comunicación.

Hace poco más de una semana que he vuelto de Cuba. Estuve durante dos semanas y, aunque me faltó tiempo para sumergirme más profundamente en la vida cubana, he vuelto con una sensación de haberla disfrutado tanto como me fue posible.

Como no es de extrañar, hubo millones de cosas que me llamaron la atención, que me sorprendieron, algunas gratamente y otras no tanto. Pero hablar de todas ellas sería un caos, y no estoy aquí para hablar de mis experiencias de viaje.

Centrándonos en lo que nos interesa, la comunicación, diré, que todavía no logró olvidar un spot que repetían una y otra vez en todos los canales latinoamericanos, que no cubanos. Se trataba de un anuncio del hospital Saint Jude de Estados Unidos, que trata única y exclusivamente pequeños enfermos, con un mensaje muy claro: ayudar económicamente al hospital para que este pudiera mejorar con el tiempo no sólo sus instalaciones, sino sus conocimientos sobre el cáncer. Las imágenes eran, para entendernos, muy crueles. Aparecían continuamente imágenes de niños y niñas enfermas hablando de su enfermedad. Lejos de concienciar al espectador, creo que directamente le invitaba a cambiar de canal. Pero esto no fue lo que más me sorprendió y no es la razón por la que os estoy contando esto.  Casi al final del spot la voz en off te explicaba que al ayudar a estos niños recibirías un paquete de bienvenida. Si señores, ¡un paquete de bienvenida!. Como si estuviéramos hablando de una suscripción al National Geographic, dónde te dan un paquete de bienvenida regalándote un libro sobre la fauna y flora africana. Sencillamente, me repugnó y me sigue repugnando.

Creo que en este caso la diferencia entre un buen y un mal anuncio queda clara. Muy lejos de concienciar y llegar a los sentimientos de los espectadores, que a mi entender, es lo que se pretendía, consigue el efecto contrario. ¿No creéis que con una causa tan justa que hay detrás, este spot no sólo no ha sabido reflejarla, sino que además no ha conseguido concienciarnos de ella?

miércoles, 3 de marzo de 2010

Enseñando

Supongo que todo el mundo habrá visto o comentado alguna vez los anuncios de Coca-Cola. Desde mi punto de vista, esta empresa tiene una de las mejores publicidades de la historia. Esto puede ser, entre otras cosas, porque una vez estando en la cima, tal y como lo esta, no le es necesario hacer publicidad comercial. Razón por la cual, trabaja con los sentimientos y las emociones. Aunque no debemos olvidar, que comercialmente hablando, esto también le beneficia directamente.

Pero bueno, dejando estas controversias de lado, hablemos de un anuncio en concreto que a mí, personalmente, me fascinó. Me refiero al reciente spot de “Estás aquí para ser feliz”. Sólo la historia, me parece preciosa, pero más me lo parece el mensaje que transmite. Todos sabemos que nuestra estancia aquí tiene un principio y un final, y cómo sea ese paseo depende únicamente de nosotros. Esta en nuestras manos ser felices o no, a veces nos será más difícil conseguirlo y otras menos. Pero somos cada uno de nosotros los que debemos tomar esa decisión. Considero, que este spot transmite a la perfección esa filosofía, y estoy convencida, que existe al menos una persona, que gracias a este anuncio haya conseguido ver las cosas de forma diferente, y se haya concienciado de lo importante que es vivir la vida hasta el más mínimo momento. Esto… es comunicación.


Empecemos por presentarnos

Creo necesario, antes de comenzar con este blog, hablaros un poquito de mí y de que voy a hablar en este pequeño espacio.

Mi nombre es Noemí y tengo 22 años. La verdad es que soy una persona bastante caótica, tengo la tendencia de hacer todo a última hora, pero me siento orgullosa de decir que, al menos hasta ahora, siempre he conseguido hacer todo a tiempo, y todo lo que hasta el día de hoy me he propuesto, lo he conseguido. Aunque parezca contradictorio, soy, al mismo tiempo, responsable y perfeccionista, a veces hasta demasiado, lo que hace no sólo que yo me vuelva loca, sino que vuelvo loca a toda la gente que esta a mi alrededor. Para terminar con este breve resumen de cómo soy, tenga la obligación de decir, que me encanta viajar, conocer nuevos países, nuevas culturas y gente nueva. Por un sencillo motivo, creo que la mejor manera de aprender y crecer como persona en está vida, es siendo tolerante y aprendiendo un poco de cada rincón de este inmenso planeta. Pues no debemos olvidar, que hasta de tu peor enemigo siempre hay algo que puedas aprender.

En estos momentos, estoy estudiando Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad del País Vasco, y este es mi último año. Es decir, este año me licencio (si todo va bien, que esperemos que así sea). Y sí, este es el momento en el que empiezan a surgir los miedos, como el típico miedo de ¿y ahora, qué? Supongo que ese miedo se supera, simplemente, confiando en ti misma. Y yo lo hago.

La razón por la que elegí estudiar está carrera es porque me apasiona el mundo de la comunicación. Y mi objetivo con este blog, es simplemente, hablar, tanto de lo bueno como de lo malo de la comunicación, e intentar de esta manera, haceros sentir un poquito más cerca de este mundo al que yo, dentro de muy poco, me dedicaré.